Hacia finales de 2018 se hizo viral un experimento[1] realizado por una conocida cadena de venta de zapatos de bajo costo, en el que se invitó a un grupo de reconocidos influencers[2] de moda a la inauguración de una nueva tienda de zapatos de diseñador. Aún cuando se trataba de una marca ficticia, los zapatos eran básicamente los mismos que venden en las tiendas de bajo costo; sin embargo, el ambiente y la decoración de la tienda daban una sensación de gran lujo y exclusividad.
Basta decir que los invitados cayeron en la trampa de las apariencias, por lo que se mostraron deslumbrados y estuvieron dispuestos a pagar cifras muchas veces más altas por los zapatos exhibidos, que el costo por el que los hubieran podido adquirir en las tiendas reales de la empresa que realizó el experimento.
Y es que no es lo mismo Dinamarca que Cundinamarca, como dice un reconocido comentarista radial Colombiano[3], quien, al decirlo, nos presenta ante la idea de que el contexto importa y debe ser considerado. E importa, porque afecta el significado de las cosas o su valor.